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Patrocinio inesperado,
corriendo con impedimentos


Hoy en día al igual que en el pasado, escuchamos a los jóvenes y viejos pilotos decir que no es fácil correr, que se necesita apoyo económico, tiempo disponible, una familia que te apoye, etc.

Esto es muy cierto pero por lo general esto no lo han dicho las grandes estrellas, quienes por su habilidad natural han destacado de una forma tal que alguien les ha echado el ojo y suple todas esa carencias.

Hoy tenemos a un excelente piloto que ha batallado con algo más, con el sexo, y no me refiero a que sea un maniático sexual sino a que el sexo ha sido una barrera que ha tenido que flanquear a pesar de su clara habilidad para el volante.

Me refiero a Mara Reyes, que por el hecho de ser mujer ha tenido que batallar mucho con posibles patrocinadores, competidores y hasta jefes de equipo, pues no es usual ver a una mujer en el rol de piloto y menos que sea buena para esto.

Ahora que si quieren ver a alguien que la tiene aun más color de hormiga, ahí tienen a Kelly Sutton, una joven piloto que desde los 16 años tiene múltiple esclerosis. MS es un mal crónico que ataca al sistema nervioso central y que puede tener distintos grados de gravedad.

En la historia de Nascar, no ha habido otro caso de un piloto que corra con este mal. A Kelly le habían dicho los doctores que para los 25 no podría ni caminar, y de hecho así fue, pero hoy, a los 30 y con 2 hijos, puede correr gracias a su determinación y a una droga -legal- que le permite vivir una vida casi normal, si bien sus doctores le recomiendan no correr.

Sin duda que Dios no solo le mandó esa droga sino que además le mandó a los que la hacen, Teva Pharmaceutical, quienes son ahora sus patrocinadores, y que mejor manera de probar que tu producto funciona que demostrándolo en la pista donde se supone que no debe de estar.

Lo extraño de esto es además que el patrocinador oficial del serial donde corre Kelly es otra farmacéutica, algo que aquí en México es casi tan raro como ver a un piloto darle el paso a otro para "darle chanza".

Si bien esta empresa es de Israel, su filial norteamericana es la que la patrocina, pero lo importante es que esta droga le permitió correr la semana pasada en Daytona en una de las categorías menores de Nascar, donde arrancó en 34 pero termino en el 11 lugar de la Daytona USA 150.

Ella participa en la serie Goody's Dash de la NASCAR Touring Division, donde corren con autos de menor tamaño y potencia a los utilizados en la Winston Cup o la Serie Busch, siendo esta una seria de promoción.

En su caso, el auto es un Pontiac Sunfire con motor V-6 de 268 pulgadas cúbicas. Su problema es que esta droga maravillosa no es una cura, solo le ayuda a vivir su vida lo más normalmente posible, pero su condición eventualmente empeorará al grado de que no podrá correr y después quizás aun algo peor.

De cierta forma, su enfermedad le trajo la forma de poder hacer realidad su sueño de correr como su padre y abuelo, quien lo hubiera dicho.

Daniel Ordaz C. Giprex (81) 8347 8560